Para obtener el Aceite de Oliva se pueden usar diversos procedimientos. El más artesanal y sano de ellos es obtenerlo sin usar altas temperaturas en el transcurso de su producción. Muchos dietistas y médicos recomiendan el aceite prensado en frío, porque garantiza que todas sus propiedades permanezcan intactas, asegurando un aceite de máxima calidad.
¿Qué significa prensado en frío?
Un Aceite de Oliva prensado en frío es aquel que ha sido obtenido a una temperatura menor de 27ºC. Este puede conseguirse mediante dos métodos: el artesanal y el industrial.
La técnica artesanal es utilizada en producciones de aceite pequeñas. Se coloca la pasta de la aceituna sobre los capachos, estos se apilan uno encima del otro y se presionan con una placa metálica para extraer el líquido de su interior. Con el se usan centrifugadoras que mantienen la temperatura baja y en las que se extrae poco a poco el aceite de las aceitunas.
Normalmente se diferencian estas técnicas con diferentes etiquetas. El que se obtiene mediante el método artesanal es el denominado ‘aceite prensado en frío’, mientras que el segundo es el ‘aceite extraído en frío’. Aun así, ambos garantizan un aceite de gran calidad.
Otros procedimientos aumentan la temperatura del aceite para conseguirlo de forma rápida y en mayores cantidades. Sin embargo, las temperaturas altas pueden modificar las propiedades del aceite. De hecho, particularidades del aroma y sabor pueden terminar evaporándose y perdiéndose, al igual que algunos de sus valores nutricionales.
Por eso es importante comprar un aceite de calidad: un Aceite de Oliva Extra Virgen conseguido a través de procesos que mantengan una baja temperatura. Cuando se respetan las cualidades y la calidad del aceite, se está respetando tu salud, y la de tu familia.
